Mi primera aproximación a la fotografía con cámara en mano fue gracias a mi papá, cuando me prestó su Voightlander y me dio las instrucciones básicas: ''si están cerca, mové el anillo hasta 3m, si están lejos llevalo hasta infinito; como vas a estar al aire libre, mantené el sol a tu espalda o de costado, la velocidad dejala en 125 y el diafragma, que es por donde entra la luz a la cámara, ponelo en 5.6; revisá que la linea roja coincida con la blanca, si se aparta demasiado mové el anillo de la velocidad o el del diafragma, cuando todo esté listo mirá el encuadre, no cortes cabezas ni pies." Me la entregó con una sola recomendación: "cuidala". Yo tenía apenas nueve años, me preparaba para ir al picnic organizado por el colegio, estaba en cuarto grado.